Un grupo de individuos irrumpió anoche en la residencia privada del mandatario acabando con su vida, indicó el primer ministro. Entre los atacantes, que no fueron identificados, se encontraban hombres que “hablaban español”, aseguró el primer ministro saliente.
El presidente de Haití, Jovenel Moïse, fue asesinado en la madrugada del viernes por un grupo de personas armadas, “algunas de las cuales hablaban español” señaló el primer ministro saliente Claude Joseph en un comunicado.
El texto indica que “alrededor de la 1 de la mañana”, “un grupo de individuos no identificados, de los cuales algunos hablaban español, atacaron la residencia privada del Presidente de la República, hiriendo mortalmente al Jefe de Estado”. “Herida de bala, la Primera Dama recibe la atención médica que requiere su caso”, agrega.
“La situación de seguridad del país está bajo el control de la Policía Nacional de Haití y de las Fuerzas Armadas de Haití. Todas las medidas han sido tomadas para garantizar la continuidad del Estado y proteger la Nación”, subraya el comunicado, firmado por el primer ministro saliente Claude Joseph.
El reemplazo de este último había sido decidido el lunes por el presidente asesinado, quien nombró en su lugar a Ariel Henry. El mandatario dijo entonces la prioridad de Henry sería la preparación de las elecciones, que deberán desarrollarse en un “ambiente propicio”.
El presidente Moïse se enfrentó a una fuerte oposición por parte de sectores de la sociedad que consideraban su mandato ilegítimo. En los últimos cuatro años el país tuvo siete primeros ministros.
Haití, la nación más pobre del continente americano, está plagada de inseguridad, particularmente de secuestros para pedir rescate llevados a cabo por bandas que gozan de una virtual impunidad. El presidente Moïse, acusado de inacción ante la crisis, se enfrentaba a una fuerte desconfianza por parte de gran parte de la población civil.
La corresponsal de RFI en Puerto Principe, Amelie Baron, agrega que “este asesinato se produce cuando el país se encuentra bajo el control de bandas armadas que se enfrentan entre ellas y desde hace un mes bloquean las rutas entre la capital y la mitad sur del país”.
El presidente Moïse se había marcado los objetivos de “formar un gobierno abierto”, “solucionar el flagrante problema de la inseguridad” y trabajar “por la realización de las elecciones generales y el referéndum”, indicó Henry.
Este referéndum constitucional, inicialmente programado para el 27 de junio y luego pospuesto en medio de la crisis, era impulsado por Moïse, pero ampliamente impugnado por la oposición e incluso en el campo presidencial porque se acusa al procedimiento de no respetar las disposiciones de la Constitución vigente.
Crédito: RFI
