Se trata de una colaboración público-privada entre el Estado de Chile y Google que conectará al país con el Asia-Pacífico. Se espera que la iniciativa, que recorrerá 14 mil 800 kilómetros de mar, se encuentre operativa a partir de 2026.
En una actividad en el Buque AP Aquiles, en la Región de Valparaíso, el Presidente de la República Gabriel Boric encabezó la presentación de la alianza público-privada entre el Estado de Chile y Google para la construcción de una fibra óptica submarina, que busca generar una conectividad directa entre América del Sur y el Asia-Pacífico.
En la instancia, el mandatario calificó este hecho como “una muy buena noticia” para el presente y el futuro del país y que, incluso, producto de la coyuntura, “cuesta dimensionarlo”.
“Chile es un país de vanguardia en muchos temas que atrae inversiones de todo el mundo, en sectores claves para el giro que está dando la economía hacia lo verde y lo digital. Me alegra comunicar que tras años de trabajos y alianzas hemos firmado un acuerdo con la empresa Google para construir el Cable Humboldt, que va a ser el primer cable submarino de fibra óptima que va a conectar de forma directa a América del Sur con Oceanía y Asia, expresó.
Según explicó el jefe de Estado “este cable también va a ser parte de una infraestructura a la cual se van a colgar muchísimas empresas, muchísimas pymes. Esto va a traer beneficios directos a miles de familias en nuestra patria y en América Latina. Así vamos retomando el camino del crecimiento y la creación de buenos empleos y oportunidades para los chilenos y chilenas”.
El Presidente detalló que este proyecto consiste en un cable de conexión digital de Internet que recorrerá 14 mil 800 kilómetros de mar “desde la costa de la Región de Valparaíso hasta el puerto de Sydney en Australia para transferir datos digitales de forma más segura, más rápida, más directa”. También tendrá una capacidad de 144 terabytes por segundo y una vida útil de 25 años.
Boric comentó que dentro de los próximos meses se realizará la firma del contrato definitivo entre el Estado de Chile y Google para comenzar su construcción, “compartir el control de las fibras y comercializar su uso con otras empresas”, de manera que el cable se encuentre operativo a partir de 2026.
“Esta red submarina va a generar herramientas de altísima tecnología, como la habilitación de sistemas industriales administrados remotamente desde otros países y consolidará el liderazgo de Chile en materias de investigación y desarrollo de la inteligencia artificial”, añadió.
Foto en portada: Comunicaciones Presidencia
Crédito: Diario UChile
